Cuando tienes a tu hija, tu casa, tu negocio en común, y en definitiva, tu vida entera con todas sus piezas encajadas y bailando al mismo son, y aún así decides casarte, sin tener necesidad, sin que nada lo requiera, eso es amor.
Amor como el que sin palabras se expresan ellos, con tan sólo mirarse aún estando uno en cada punta de la habitación. Y podemos dar fe de ello, pues tuvimos la suerte de vivir esta boda desde dentro, de convivir con ellos durante 3 días de preparativos, alegría, emociones y sentimientos a flor de piel.
Vejer de la Frontera con sus casas bañadas de luz, el mar de fondo y un septiembre cálido y dulce, fueron escenario de esta boda atípica, que se celebró en la finca Buenavista, una hípica propiedad de los novios a la que el restaurante El Califa y la propia pareja, se encargaron de dar un toque árabe y desenfadado, en la fiesta a la que puso música el grupo "Los Intocables".
Pasad, y disfrutad como nosotros lo hicimos :)