Siempre nos gusta tener un primer contacto en persona con nuestros novios antes de que llegue el gran día, pero en el caso de Rocío & Jo no pudo ser debido a la distancia, pues residen fuera de España. Tengo que confesar que aquella tarde calurosísima de agosto, llegué algo nerviosa a Granada por esa razón. En todas las bodas me entra un cosquilleo de expectación y me acelero un poco, es una gran responsabilidad fotografiar un día tan especial en la vida de una pareja, pero los nervios aumentan si no nos conocemos! Por eso, fue una grata sorpresa ver desde el momento en que entré en aquella preciosa habitación donde ella se estaba preparando, que Rocío era una mujer cercana, cariñosa y que sonreía sin parar. Me hizo sentir muy a gusto desde el principio, y todo salió a la perfección.
Granada es una ciudad mágica, y si además lo que te toca recorrer son sus calles más bonitas, su albaicín, y puedes disfrutar de unas vistas maravillosas a la Alhambra, es una auténtica suerte. Así fue durante la boda de esta pareja tan bonita. Tuvimos sólo unos minutos para realizar su reportaje entre la ceremonia y el cóctel, de hecho lo hicimos de camino al Palacio de los Córdova andando, pero la felicidad del momento y su actitud tan buena nos regalaron unas fotos magníficas, envueltas en la luz siempre especial del Paseo de los Tristes.
Rocío vistió una pieza preciosa de Teresa Baena, que constaba de dos piezas: un vestido ceñido en blanco puro con escote palabra de honor que sorprendió en la fiesta al quitarse el sobrevestido bordado de flores y con la espalda en uve en tono hueso que llevaba encima. Por su parte, Jo
Granada es una ciudad mágica, y si además lo que te toca recorrer son sus calles más bonitas, su albaicín, y puedes disfrutar de unas vistas maravillosas a la Alhambra, es una auténtica suerte. Así fue durante la boda de esta pareja tan bonita. Tuvimos sólo unos minutos para realizar su reportaje entre la ceremonia y el cóctel, de hecho lo hicimos de camino al Palacio de los Córdova andando, pero la felicidad del momento y su actitud tan buena nos regalaron unas fotos magníficas, envueltas en la luz siempre especial del Paseo de los Tristes.
Rocío vistió una pieza preciosa de Teresa Baena, que constaba de dos piezas: un vestido ceñido en blanco puro con escote palabra de honor que sorprendió en la fiesta al quitarse el sobrevestido bordado de flores y con la espalda en uve en tono hueso que llevaba encima. Por su parte, Jo